La Conferencia Episcopal Argentina
(CEA) difundió un documento crítico de la situación actual del país en el que
afirma que “la Argentina está enferma de violencia”. En ese sentido advierte:
“Los hechos delictivos no solamente han aumentado en cantidad en agresividad”.
Asimismo expresa que “es evidente la incidencia de la droga en algunas
conductas violentas en el descontrol de los que delinquen”. En otro tramo
dice que “la corrupción, tanto pública como privada, es un verdadero ´cáncer
social´ (EG 60), causante de injusticia y muerte. Desviar dineros que deberían
destinarse al bien del pueblo provoca ineficiencia en servicios elementales de
salud, educación, transporte”. Seguidamente ofrecemos el texto completo de la declaración
que se titula “Felices los que trabajan por la paz”:
1. Como pastores
del pueblo de Dios -del que provenimos y al que queremos servir- nos dirigimos
a todos los miembros de la Iglesia y a los hombres y mujeres de buena voluntad,
para compartir nuestra mirada sobre un aspecto inquietante de la realidad
nacional. Constatamos con dolor y preocupación que la Argentina está enferma de
violencia. Algunos de los síntomas son evidentes, otros más sutiles, pero de
una forma o de otra todos nos sentimos afectados. Queremos detenernos a
reflexionar sobre este drama porque creemos que el amor vence al odio y que
nuestro pueblo anhela la paz.